Bahá’í World News Service
MOTIBASTI, Nepal, 29 de junio de 2020, (BWNS) – Con muchos trabajadores migrantes que regresan a sus hogares en medio de la pandemia, la Asamblea Espiritual Local Bahá’í de Motibasti, Nepal, está analizando lo que puede hacer para mejorar la capacidad de la comunidad para producir sus propios alimentos.
“Ahora hay muchas ONGs y agencias que están ayudando a las personas con sus necesidades inmediatas”, dijo Hemant Prakash Budha, miembro de la Asamblea Espiritual Local. “Pero la Asamblea se da cuenta de que puede pensar en soluciones a largo plazo. Este pueblo tiene la tierra y las habilidades para producir alimentos. Pero, ¿cómo podemos gestionar si no organizamos nuestros esfuerzos agrícolas como comunidad?”
La Asamblea Espiritual Local ha estado consultando semanalmente desde el comienzo de la pandemia para ayudar a identificar y satisfacer las necesidades de la comunidad. Recientemente, ha estado conectando a los trabajadores migrantes que regresan con oportunidades para sembrar parcelas no cultivadas que pertenecen a residentes del área.
“Nuestra actitud no es de dependencia, donde algunas personas tienen todo y otras carecen”, dice Prasad Acharya, un residente de Motibasti. “Vemos como todos pueden contribuir a la comunidad. Este es un aspecto del principio Bahá’í de la unidad de la humanidad: que todos son una familia y todos priorizan las necesidades de los demás”.
Basándose en el conocimiento local y el asesoramiento de expertos, la Asamblea ha ayudado a las familias a determinar qué cultivos y ganado proporcionarán las mejores fuentes de nutrición para la aldea.
La Asamblea ha sido ingeniosa para ayudar a la comunidad a superar los obstáculos. Por ejemplo, cuando una parte de la aldea descubrió que carecía de agua para riego, la Asamblea buscó ayuda de funcionarios locales y regionales que organizaron la perforación de un pozo.
El Sr. Prakash Budha, reflexionando sobre estas experiencias, afirma: “La comunidad está preocupada por una posible crisis alimentaria, el aumento del precio de los productos y otros temas como la educación de los niños. Cuando las personas consultan de manera espiritual, con amor y amabilidad, comienzan a darse cuenta de las oportunidades que se les presentan y de cómo pueden avanzar. La consulta crea la esperanza de que pueden tomar medidas y cambiar las cosas”.
Para leer el artículo original en inglés: https://news.bahai.org/story/1437/